Nunca es tarde, si la dicha es buena o más vale tarde que nunca; da igual, cualquiera de los refranes me vale para celebrar que ya tengo en casa mi regalo del día de la madre. Se trata del libro de Christiane Northrup Madres e hijas.
No leo mucho, esa es la verdad; primero porque no tengo demasiado tiempo libre, siempre hay algo pendiente de la lista de prioridades; y segundo, me cuesta concentrarme en algo durante varios minutos seguidos porque cuatro pequeños seres que habitan mi casa tienen la costumbre de empezar sus frases con "¡mamá!" aunque luego el tema no tenga demasiado que ver conmigo.
Conocí a C. Northrup a través de un artículo que leí en el blog el dedo en la llaga, en el que hablaban de su libro Sabiduría de mujer, cuerpo de mujer. Me gustó lo que leí, así que busqué más bibliografía de esta tocóloga-ginecóloga, y me encontré con Los placeres secretos de la menopausia y Madres e hijas. El de Los placeres secretos lo dejo para más adelante, pero el de Madres e hijas necesitaba leerlo ya, y ¿qué mejor oportunidad que aprovechar el día de la madre para recibirlo?.
"Cada hija lleva consigo a su madre, y a todas las madres que existieron antes que ella... Para asegurarnos, a nosotras y a nuestras hijas, un futuro sano y feliz debemos identificar de qué modo la historia de nuestra madre ha influido y sigue influyendo en nuestro estado de salud, creencias y modo de vida...Por encima de todo, Madres e hijas nos enseña que para transmitir un legado de salud física y emocional a nuestras hijas, debemos empezar por sanarnos a nosotras mismas.
Esto es algo que yo intuía, pero no sabía como explicarlo ni como abordarlo. Creo que este libro va a cumplir mis espectativas. Tampoco creo que sirva solo para madres con hijas, ya que si somos capaces de conseguir un bienestar emocional, repercutirá de forma muy positiva en nuestros hijos sean del sexo que sean. Aunque bien es cierto que hay aspectos en este libro "muy de chicas", como todos los relacionados con el tema de la menstruación y las marejadas hormonales que la rodean. Una frase que me ha llamado la atención sobre este tema mientras ojeaba el libro es "hija en la pubertad, madre en la menopausia"; me ha hecho reflexionar...
Como ya os he comentado, leo despacio, pero cuando lo termine os cuento mis impresiones.
No tengo hijas, pero probablemente sería una mujer más feliz si la relación con mi madre fuera más sana.
ResponderEliminarLee más y nos cuentas.
Hola puede que este libro acompañe a los que ya tengo en mi mesilla, pero esperaré que cuentes un poco más... estoy deacuerdo en que llevamos dentro parte de nuestra madre de muchos aspectos subliminares que nos han acompañado en nuestro tiempo con ella, lleva su tiempo analizar nuestro pasado y como se refleja en nuestro ahora... te sigo
ResponderEliminarLlevamos un poco de nuestra madre, cosas que nos gustan y admiramos y otras que no tanto; más veces de las que nos gustaría aflora en nosotras esa parte que nos agrada menos y es justo eso lo que nos contraría y lo que estropea esa relación maternofilial.
ResponderEliminarPilar y Alexia, muchas gracias por estar ahí, incluso en fin de semana.
Un besico.
Nuestras generaciones pasadas, nuestra historia familiar influye en quién somos nosotros. Y creo que aunque nuestras hormonas tendrán bastante que ver, el hecho de que en la sociedad en la que vivimos durante muchos años haya sido la madre la que se ha encargado de la crianza de los hijos ha hecho que aprendamos más de ella que de nuestros padres. Esa "herencia" puede ser más o menos positiva, pero tenemos toda la vida para cambiarla y que la siguiente generación de "futuras mamás" reciba más bueno que malo.
ResponderEliminarMi madre para mi es una madre coraje y de ella espero transmitir a mi hija la fuerza para luchar, la capacidad de trabajo, el inmenso amor con el que nos ha criado a mi y a mis hermanos,... Lo menos bueno se que se quedará por el camino.
Gracias Fina. A veces pensamos que lo menos bueno lo hemos dejado por el camino, y no es así; lo hemos escondido en el fondo de la mochila y es justo cuando perdemos el control de la situación cuando sale de la mochila y volvemos a reproducir esos comportamientos, sin darnos cuenta.
ResponderEliminarMe ha encantado cuando en el post dices que las frases en casa comienzan con "mamá....." y en muchas ocasiones no tienes nada que ver con la petición, pregunta, comentario o lo que sea.... ; )
ResponderEliminarEsto creo que se repite en la mayoría de nuestras casas....
Ya nos contarás algo más del libro..que promete!!!...yo también tengo más bien poco tiempo para la lectura....a parte de informes y ahora examenes....ufffffffffff....
Muchas gracias por contarnos estos trocitos.....
Maite
Muchas gracias a tí por volver a visitarme, Maite.
ResponderEliminarUn besico
Hola Sonia, por aqui me paso un ratito todos los días y te leo y releo, con la llegada del veranito y teniendo espero por delante días de piscina estoy pensando en comprar un libro y también releer alguno, ¿cómo vas con madres e hijas? ¿te está gustando? cuentanos cuando puedas un besazo...
ResponderEliminarGracias alexia. Como verás, vuelvo a estar de bajón energético, pero resurgiré como el ave fénix en cualquier momento.
ResponderEliminarDel libro he leído poco, pero me va gustando.